martes, 18 de noviembre de 2014

MAD.

Home sonaba en mi cabeza,
tu mirabas impasible por la ventana,
rescantando imágenes que no te hacían olvidar,
yo seguiría mirando tus facciones,
leyendo todo lo que tus labios no susurraban,
pero que tus ojos gritaban.
Tumbados, 
en la torre más alta,
del más alto refugio,
con vistas a absolutamente nada,
pero que significan absolutamente todo.
Una lágrima recorre tu rostro,
la belleza existe
y con promesas nos deshacemos de malas ideas.
Te quiero,
tanto que tiemblo
y aunque los milagros cobren forma humana,
solo tu haces que renacer,
se convierta en una posibilidad.
Como reproducirte en mis pensamientos cada mañana
y en mis sueños cada noche.
Si eso no es amor,
no es nada…
.
.
.
…pero  vuelves a ser mi milagro.


2 comentarios: